buñuelos de calabaza

Estamos en Fallas y después de la despertá  o a media tarde, o bueno, a casi todas las horas apetece unos buñuelos de calabaza con una buena taza de chocolate. Es una receta muy sencilla y fácil pero....., siempre hay un pero, sino lo has visto hacer es difícil que te salgan con la forma adecuada (os detallo un paso a paso). Existe un utensilio para que salgan todos redondos y con el típico agujero, aunque yo aconsejo hacerlos a mano, es mucho mejor y así conservamos las tradiciones.

 Meter la mano en la masa siempre me recuerda al párrafo  del libro COMO AGUA PARA CHOCOLATE de Laura Esquivel,  cuando la protagonista ve al amor de su vida: "en ese momento comprendió perfectamente lo que debe sentir la masa de un buñuelo al entrar en contacto con el aceite hirviendo". Os lo recomiendo, es una novela realmente deliciosa que se desarrolla entre recetas.                                

Precio 3,50 €

Precio 1,60 €

Bueno, dicho todo esto ! Manos a la masa!




Ingredientes:                                                                    

- 1.000 g de calabaza cocida y bien escurrida.
- 300 de harina.
- 35 g de levadura prensada
- Aceite.
- Azúcar para espolvorear.

( Estos ingredientes son aproximados. La cantidad de harina nos hará el bueñuelo más o menos consistente, así que es mejor iniciar la fritura de la masa con la mínima cantidad de harina y después ir añadiéndole poco a poco si el buñuelo no os queda con la consistencia adecuada)


Preparación:

La calabaza la puedes hervir, asar al horno o cocerla en el microondas. Si la asas no le quites la piel, la partes por la mitad y cuando esté dorada y no ofrezca resistencia a la penetración del cuchillo !Ya está¡ El tiempo de cocción varía según el tamaño de la calabaza.
Pondremos la calabaza sin piel y cocida  en un bol  e iremos añadiendo la levadura desecha y la harina,  con una espátula o con la mano iremos mezclado los ingredientes. Con los movimientos envolventes  de la mano la mezcla se va haciendo un puré.
La dejaremos reposar aproximadamente una hora.
En una sartén con abundante aceite bien caliente iremos poniendo  la pasta de los buñuelos; cuando estén dorados los sacaremos y los pondremos sobre papel de cocina, para que absorba el exceso de aceite.
Comerlos espolvoreados con azúcar.